Periodistas: Susana Saad

Empezó haciendo radio y televisión en Córdoba y luego pasó por varias emisoras santiagueñas. Hoy hace diez años que es una de las principales voces de Radio Nacional. Conduce, además, Para Toda Mujer en canal 14 de TIC. Susana Saad entiende al periodismo como un servicio, y cree que hay que involucrarse con las historias y las personas a las que contamos, para aprender de ellas y tratar de ayudarlas.  

 

Entrevista: Eugenia La Mónica y Fátima Morales

Producción Audiovisual: Diego Torres, Eugenia La Monica, Fátima Morales, karina Estanciero, Raul Ninich, Facundo Silva, Luis “Cara” Díaz, Mónica Corbalán

 

¿Cuándo has decidido dedicarte al periodismo?

Desde chiquita. En general, creo que es lo que nos pasa a todos los periodistas o a los que trabajamos en los medios de comunicación. Cuando somos chicos y estamos en el colegio, que nos elijan para conducir los actos. Me acuerdo que estaba entre conducir o ser abanderada y prefería toda la vida conducir. Eso es lo que más me gustaba. El hecho de estar frente la gente, saber que me están escuchando, mirando, el hecho de decir voy a estar ayudando a la gente.

Ya cuando era más grande me iba dando cuenta de la importancia que tienen los medios de comunicación, de que es un servicio con el que puedes ayudar a los demás. Siempre desde chiquita me ha gustado lo que es la conducción, ya sea en radio o en televisión. No tanto en los medios gráficos porque no he incursionado mucho en eso, pero en lo que es radio y televisión creo que tiene que ver con esto de que cuando era chica, el hecho de conducir los actos y conocer radios. Yo les decía a mis papás que quería conocer tal FM. Creo que eso ha despertado la vocación que hay en mí.

¿Crees que es importante estudiar para ejercer el periodismo?

Hay muchos periodistas que no han estudiado y son periodistas para sacarse el sombrero. Pero hoy creo que es importantísimo el hecho de estudiar para trabajar en lo que a uno le gusta. Y no solamente esto de estudiar y quedar con el título sino el hecho de seguir perfeccionándote, máxime con esto del uso de la tecnología y demás creo que es fundamental. Te da todas las herramientas, se te abre un abanico mucho más grande para poder trabajar en todo, a nivel profesional y personal. El estudio es fundamental.

¿Cómo fueron tus comienzos?

Yo estudié en Córdoba Periodismo y Locución. Trabajaba y estudiaba. Empecé en LV2, una AM, con Jorge Gacheta Kelly, hacía la parte de co-conducción. Primero empecé como columnista de Espectáculos, hace como 15 años. Después trabajé en un programa de tele. Hacía la parte de producción de un programa que se llamaba Nivel 1. Hice conducción en un programa para las mujeres embarazadas.

En Carlos Paz también tuve la experiencia de trabajar en una radio. Estaba trabajando en una empresa haciendo telemárketing porque muchos estudiantes cuando vamos a otras provincias, para ayudar a nuestros viejos, que nos están ayudando económicamente para poder estudiar y que no sea tan pesado, muchos trabajamos: en mi caso haciendo telemarketing: llamaba por teléfono a cualquier hora para ofrecer un servicio. Con esa plata me mantenía, cubría parte de mis gastos y la otra parte mis viejos. Estaba en una empresa muy importante de emergencias médicas. Conozco a una persona de Santiago que estaba viviendo en Carlos Paz y me ofrece para que me haga cargo de una radio, yo tenía 21 años, no me había recibido todavía y le dije que sí. Viajaba todos los días a Carlos Paz. Era desde las 18 hasta las 12 de la noche. Estuve trabajando ahí y nunca me pagaron absolutamente nada de nada. No ha sido una experiencia muy linda, sí a nivel profesional porque he aprendido muchísimo. El hecho de manejar una radio, hacerme cargo de todo lo que era la producción, publicidad, la conducción del programa, pero no me han pagado un mango así que he tenido que volver a Córdoba a seguir laburando.

Estuve ocho años en Córdoba. Después me fui a Jujuy, puse un instituto de capacitación laboral con una socia, estuve dos años ahí. Después volví a Santiago. Arranqué trabajando en Radio Activa, dos años estuve ahí con Dani Verón porque estaba buscando trabajo.

Después me llaman por teléfono de Panorama, donde estuve trabajando cinco años prácticamente. Estaba haciendo móvil en la mañana, después hacía los flashes informativos a la siesta. Hacíamos buena dupla con Juancho Carabajal y nos llaman para hacer un programa, “Buen Día Santiago”, que era todas las mañanas, de 7 a 8 por canal 7. Estuvimos un año y medio haciendo ese programa.

Después me caso, quedo embarazada de los mellis. Estuve cuatro meses en Córdoba porque nacieron prematuros. Vuelvo a Santiago, continué trabajando en Panorama, no teníamos más el programa en Canal 7 y me llaman de Radio Nacional. Hace 10 años que estoy ahí y hace cinco que tengo un programa en Canal 14 de TIC que es para toda la familia y se llama “Para toda mujer”.

¿En algún momento has pensado en dejar la carrera?

En dejar no. Sí en: ‘no gano un mango’, tengo que vender publicidad para poder tener un sueldo. Creo que eso nos ha pasado a muchos. Te da impotencia el hecho de haber invertido en tus estudios, haber pagado los estudios en los públicos o privados, todo implica un costo, y tener que trabajar por dos mangos o por publicidad, te hace pensar: “che ¿habré hecho bien en estudiar esto?”. Pero nunca he dudado. Por ahí decía: “De última, sigo laburando en lo mío y busco algo que pueda redituarme más económicamente”. Pero dejar de hacer lo que me gusta, no. Y gracias a Dios soy una bendecida porque puedo trabajar en lo que a mí me gusta y me pagan por eso también.

¿En qué historias, de las que te han tocado contar, te has involucrado?

Cuando trabajaba en Panorama me tocó cubrir lo del Penal de Varones, cuando se dio esto del acuartelamiento. Eran más de 30 personas las que habían fallecido. El hecho de cubrir eso… estaban las ambulancias, estábamos en el hospital Regional. Uno de los móviles estaba en el Penal, otro en el hospital. Teníamos que ir y volver, ver la lista de las personas que estaban heridas, las fallecidas; ver cómo los médicos les pasaban la lista a los familiares. Eso ha sido muy fuerte.

El hecho de cubrir también, por ejemplo, el caso de un chico que se había perdido. Una semana buscándolo y un día me llama la mamá para decirme que había aparecido. Yo le digo: “¡Qué bueno! ¿En dónde está?”. Y me dice: “No, está muerto, está ahogado en el canal’. Tuve que cortar el teléfono y me largue a llorar. Hay varias historias así fuertes.

Ahora también en el programa. Uno por ahí se hace mala sangre por cualquier cosa, porque no te alcanza para llegar a fin de mes o cosas que por ahí son medio superfluas. En mi programa de tele estoy en contacto con mucha gente que tiene problemas de salud y vos dices: he me hago mala sangre por tantas cosas y hay niños que tienen problemas de crecimiento, chicos que no tienen la plata para poder respirar porque necesitan un tubo de oxígeno. Chocas con una realidad totalmente distinta a la que uno vive, por suerte o por desgracia. Son cosas que te pegan y uno agradece lo mucho o lo poco que tiene.

¿Qué fue lo que más te impacto de la cobertura en el autoacuartelamiento en el penal?

Lo que más me ha impactado era esto de las familias, el hecho de no saber. Todavía no era mamá, pero me ponía en el lugar de las mamás que estaban sin saber cuál era el estado de estas personas. Más allá de lo que hayan cometido, de lo que hayan hecho, eran personas. Ver la desesperación de las familias, de las madres que nos sabían si estaban vivos o no. Si bien estaba la familia entera de los reclusos, ver la desesperación de las madres, esa impotencia de querer saber cómo están y que no te den un parte médico. Eso ha sido muy shockeante.

Creo que el periodismo ha sido muy importante en ese momento. Había personas que no habían podido llegar al penal. Teníamos un parte médico con los nombres de las víctimas. Creo ES un papel muy importante el del periodista en ese momento, no tratando de vender algo que no sea, o siendo amarillista por decirlo de alguna manera. Creo que el periodismo ha jugado un papel muy importante para poder brindar información necesaria y justa a las familias, y contarle a Santiago del Estero qué es lo que estaba pasando en ese momento.

¿Cuál es el peor consejo que has recibido?

Eso que contaba de la mujer que me llama por teléfono y me dice que lo habían encontrado al hijo, que había fallecido. Entonces yo me largo a llorar. Una persona, para la cual yo trabajaba, me ve y me dice, cómo te vas a poner a llorar. No te puedes poner a llorar porque haya aparecido una persona muerta. Lo miro y le digo, el día que no me involucre por estos casos, dejo de trabajar. Porque antes de ser profesional, de ser periodista, somos personas. Eso es lo más importante.

Creo que ese ha sido un consejo que no seguiría nunca el hecho de no involucrarme con lo que les pasa al entrevistado a otras personas.

¿Cuál es la importancia que tiene el humor en tus programas?

Todo. Trato de tomarlo todo con humor, tanto en la radio, como en la tele. Si por ahí tengo que hacer alguna entrevista y viene algún entrevistado y veo que no está muy cómodo, que nunca ha hecho cámara entonces me relajo, le digo: “Hoy no me he teñido el pelo”. Siempre buscando el humor para que la otra persona no esté tan estructurada, no esté tan nerviosa, o si tenemos que dar alguna mala noticia.

Con la crisis que estamos atravesando hoy creo que al humor no tenemos que perderlo bajo ningún punto de vista. Creo que es primordial para todo; el trabajo, tu vida personal, si estás atravesando un momento malo de salud, para lo que sea, creo que el humor es fundamental.

¿Dónde te ves dentro de 20 años?

Yo creo que voy a seguir haciendo esto. Me encantaría seguir trabajando en los medios, que es lo que a mí me gusta, tanto en la radio como en la tele. Dentro de 20 años, no sé si al frente de cámara o detrás haciendo producción. Tengo a mi hijo al que le encantan las cámaras así que podemos trabajar algo con mi hijo, con mi hija, creo que va a pasar por ahí, siempre relacionado con los medios de comunicación.

Si no tengo la suerte de trabajar en los medios, disfrutando de lo que me toque hacer. Yo creo que pasa también por ahí, uno tiene que saber disfrutar, tiene que saber valorar e laburo que tiene.

¿Cuál es el objeto que has elegido traer para compartir, y que te representa?

El objeto que me ha ayudado muchísimo cuando viajaba de Santiago, es un walkman. Me ayudaban mucho porque cuando uno se va a otra provincia extraña. Mi papá me había regalado este aparatito con los CD’ s que a mí me gustaban. Cuando viajaba en colectivo a Córdoba a estudiar vivía escuchando eso, o a las noches en que tenía esos momentos de melancolía o los domingos, que son re depresivos para los estudiantes. El walkman es algo que me acompaña desde siempre. Lo relaciono mucho con mi oficio por la música por el hecho de decir la música cómo te relaja, te remonta a diferentes momentos de tu vida. La radio más allá de informar también tiene que uno escucha que sabes que vas a pasar a tus oyentes. En la radio y la tele tiene que haber una muy buena la musicalización, eso también ayuda a que un producto sea bueno.

 

Material producido en la cátedra de Taller de Periodismo Televisivo. Docente a cargo: Lorena Jozami