Periodistas: Roberto Ayala

Como muchos de su generación, Roberto Ayala empezó en el periodismo deportivo en LV11, pasó al periodismo político y de actualidad en Radio Exclusiva y luego migró a Radio Panorama, donde hoy es coordinador general de la emisora. Además, es el productor de Libertad de Opinión. Aquí su mirada y su memoria sobre el oficio periodístico.

 

Entrevista: Karina Estanciero y Luis Díaz

Producción audiovisual:  Diego Torres, Karina Estanciero, Raul Ninich, Luis Diaz, Elena Argibay, Facundo Silva. 

 

 

¿Cómo es un día de trabajo tuyo?

La producción general de cuatro programas es lo que realizo en un día normal de trabajo.  Ello significa  un despliegue importante de personal  periodístico, administrativo y manejo de tiempos en la producción de la radio. Además del canal. En realidad, la labor es mucho más compleja e incluye muchos otros tópicos que no caben en una sintética nota  periodística. Lo importante, más allá de los mayores o menores detalles, es cómo trabaja este medio, con total independencia y eso sí, es importante.

Un día de trabajo, no solo es el horario que cumples, sino el repaso de todo lo realizado durante el día. Anticiparme a las noticias es mi mejor forma de hacer periodismo y eso se logra con la lectura de todos los diarios habidos y por haber, siempre en busca de la información, de un hecho destacado, algún indicador que me anticipe la noticia, y que será la forma de trabajo del día siguiente.  La clave es anticiparme  y el manejo del hecho informativo, el disparador. Pienso  que en el ejercicio de esta profesión, uno debe estar siempre informado. Hacer periodismo me gusta. Por eso tengo el hábito de leer  todos  los días, aun cuando estoy en casa. Y te das cuenta que toda esa información que leíste te sirve, y mucho.

¿Cuál es tu herramienta periodística de trabajo por excelencia?

Esa facilidad te la da el teléfono, tu agenda, un número. Cuando tienes poco tiempo el celular y la agenda son una fuente importante de trabajo y de noticias. En otras épocas también lo fue la guía y el teléfono de línea. Pero con el internet,  hoy,  puedes estar conectado con el mundo. En un instante estas  al aire, o en vivo  y manejar la difusión  a través de las redes sociales. Y todo ello a través del celular. Es una herramienta de trabajo muy importante  para los que hacemos periodismo, pero también esa una responsabilidad el manejo de la información.

Pensando en los muchos jóvenes  que a diario dejan su currículum en un medio, como  la radio o el canal y las muchas veces que no logran ingresar, pienso en lo maravilloso de la tecnología y de las cosas que se pueden realizar.  Hay que buscarle la forma, la vuelta de rosca, mas en nuestra función de periodistas y hacer que esta tecnología sea una fuente laboral.

¿Tienes algún consejo para los que ejercen la profesión?

Que desarrollen un estilo propio. Es un desafío, pero también será su estilo personal.  Y que nunca deben cortar y pegar, cuando de información se trate.

¿Cómo ves el tema de la perspectiva de género en los medios?

Los tiempos han cambiado. La broma, la palabra desmedida hacia la mujer en los medios, lo que era común ya no lo es. Esos tiempos no van más y está bien que  los cambios se den en la sociedad. Mucha gente la pasó mal, se perdieron vidas y hay muchas más que sufrieron y sufren. El tratamiento  de la noticia con perspectiva de género, es toda una problemática que se debe seguir tratando.

 

¿Cómo has vivido el periodismo durante la dictadura?

Corría la época del mundial del 78 por aquel entonces, un año antes,  ya había comenzado con la actividad periodística deportiva. Junto a Rogelio Llapur logramos la trasmisión del mundial a través del programa “El Centro Operativo” emitido por LV11.

Recuerdo, era un momento difícil. Por aquel entonces, no se  podía mandar saludos por radio, ni dedicar temas musicales, en algunos casos la información primero debía pasar por los filtros antes de salir al aire;  pero desde el ámbito del deportes no lo sentimos. Se vio mas desde los muchachos que hacían periodismo político, o los que hacían informativo. En ellos era evidente la presión. Si notamos un clima raro, extraño, nos llegaba. Creo, tal vez por el hecho de avocarnos a la parte deportiva, no dimensionamos exactamente lo que estaba pasando.

¿Y el Santiagueñazo?

Sin lugar a dudas, aquel 16 de diciembre de 1993 significó un antes y un después en la historia de Santiago. Todos los medios del país y del mundo lo reproducirían como el Santiagueñazo. Pero yo además lo viví como  la quema de los tres Poderes. El Poder Ejecutivo, el Poder Judicial y el Poder Legislativo. Un hecho histórico jamás sucedido en todo la historia de nuestro país, ni del mundo. Y no solo  porque fuesen quemados, sino también saqueados.

Recuerdo que estábamos en Radio Exclusiva y junto a Wily Ayuch, hacíamos unidades móviles para radio Exclusiva. Dos días intensos el 16 y 17 de diciembre. Lo recuerdo bien porque durante esos días salíamos en directo, desde la radio, pero también para la BBC de Londres.

Seis días antes de ese acontecimiento trascendental de nuestra historia, veníamos acompañando la información, y todo nos hacía parecer que la situación estaba mal, que la provincia estaba mal. Por ello, decidimos desplegar el operativo informativo desde las 6:30 y no desde las 8 am. Como habitualmente se realizaba. Los encuentros de las personas en protesta eran desde muy temprano, entonces la vimos venir, me anticipe a los hechos, es por eso que empezamos a movilizarnos desde seis y media de la mañana.

Reconozco que nunca esperamos una reacción del pueblo de esas características. Cuando  la producción de la BBC  de Londres nos contacto para tomar la trasmisión de la radio, le pregunte el por qué nos llamaban. Para ellos en ese momento, Santiago del Estero era lo más importante que estaba pasando en el mundo. Esa fue su respuesta. La quema de los tres poderes, un hecho histórico en nuestra provincia, jamás sucedido en el mundo.

¿Cuál es tu mirada sobre la formación periodística y la universidad?

Considero que el aporte que les brinda la Universidad Nacional de Santiago del Estero a la profesión es sumamente importante. Esto va a permitir que haya un recambio generacional. Yo vengo del periodismo por vocación, del que se hace día a día. Pero que ustedes tengan la posibilidad de obtener un título de grado, simplemente es maravilloso. Mi aporte final es que no solo las universidades y los institutos los formen en la profesión,  sino también les generen posibilidades de práctica laboral, y que a la hora de buscar trabajo, ingresen a un medio sabiendo hacer. Eso sería fantástico.

 

Material producido en la cátedra de Taller de Periodismo Televisivo. Docente a cargo: Lorena Jozami