Anticuerpos monoclonales para mejorar la producción ganadera

Con el fin de estimular la producción ganadera y no incurrir en pérdidas económicas, investigadores santiagueños buscan respuestas a los problemas que más aquejan este sector. Fernando Rivero es director de un proyecto de desarrollo biotecnológico en la UNSE para implementar métodos de diagnóstico de enfermedades en el ganado bovino.

 

Por Belén Taboada

 

En los últimos 10, la actividad ganadera alcanzó un desarrollo sostenido en el NOA, incrementado notablemente su producción superando condiciones ambientales extremas, escasez de agua y alimento. Santiago del Estero cuenta con más de 1.500.000 cabezas de ganado bovino. El apoyo de las inversiones públicas y privadas, la han consolidado como un nuevo centro ganadero del país. Este hecho impulsó la radicación del frigorífico Forres Beltrán S.A., uno de los establecimientos más grandes de Latinoamérica.

En este sitio, de aproximadamente  34 hectáreas y 16.000 metros cuadrados de edificación, se faenan 1.000 animales diarios y 2.600 cuartos por turno, lo cual le permite abarcar la mayoría de los rodeos bovinos del norte del país.

Problemas encontrados

La creciente demanda y el incremento de los controles bromatológicos y sanitarios como consecuencia de las enfermedades transmitidas por los alimentos (como es escherichia coli) han planteado la necesidad de disponer de nuevas tecnologías y servicios técnicos especializados.

En la región se puede apreciar que existe una notable ausencia de laboratorios de alto nivel tecnológico. Este factor generó la centralización de los servicios en las grandes ciudades, elevando los costos debido a la distancia e impidiendo un incremento de la productividad.

Más del 50% de las fallas reproductivas en bovinos son debidas a causas infecciosas existiendo, para algunas de ellas, mecanismos de prevención mediante vacunas y planes de manejo sanitario.

La presencia de enfermedades infecciosas de la reproducción en el rodeo nacional implica una reducción estimada del 10% o más del porcentaje de preñez.  Teniendo en cuenta la cantidad si se estima que existen aproximadamente 20 millones de vacas las cuales destetan anualmente 11 millones de terneros, dichas pérdidas económicas oscilarían en 1,1 millones de terneros anuales. Asignando un valor estimado de 400 dólares para un ternero destetado, la pérdida anual sería de aproximadamente 440 millones de dólares.

En Santiago del Estero el stock de animales se estima en 1,7 millones de cabezas con una pérdida anual de aproximadamente 32 millones de dólares. Datos que son estimativos ya que no se cuenta con un organismo que monitoree la situación. Santiago del Estero no dispone de ningún laboratorio que realice o certifique controles sanitarios respecto a estas patologías, lo cual representa un aumento del costo por parte del productor o una disminución de los controles generando un detrimento en la cantidad y calidad productiva.

Tomando como base estos ítems se obtiene como resultado dos problemas que aquejan al sector ganadero santiagueño. En primer lugar el deficiente control sanitario para contener y eliminar enfermedades infecciosas del ganado (Tricomoniasis, Campylobacteriosis, Cryptosporidiosis, etc.). En segundo lugar la falta de infraestructura y tecnología para optimizar los controles sanitarios de la carne bajo los requerimientos nacionales e internacionales de forma rápida y efectiva.

Rivero explica que “como anteriormente Santiago del estero no tenía un servicio de diagnóstico y a nivel mundial tampoco existen nuevos métodos de diagnóstico efectivos para este tipo de patologías, nosotros los desarrollemos para que se apliquen directamente en la provincia y de esa manera contribuir con la producción ganadera.”

Respuesta a las demandas

Para evitar todos estos condicionantes que producen notables perdidas económicas en el sector ganadero el grupo de investigación perteneciente al Centro de Investigación y Transferencia de Santiago del Estero (Citse) se ha propuesto trabajar en conjunto con los productores locales y el frigorífico Forres- Beltrán con el objetivo de crear un centro biotecnológico con capacidad de desarrollo de tecnologías y servicios innovadores tendientes a satisfacer las necesidades de ambos sectores.

Rivero dijo al respecto: “Nosotros creamos desde hace un par de años atrás el primer servicio de diagnóstico en la provincia contra estas enfermedades. Que son dos, una es una enfermedad parasitaria que el agente causal es el Tritrichomonas foetus y la otra es una enfermedad bacteriana causada por Campylobacter fetus. Trabajamos en conjunto con los productores ganaderos y el consejo de veterinarios”.

Realizan un especial hincapié en la generación de nuevas metodologías diagnósticas y la implementación de técnicas moleculares e inmunológicas para el monitoreo y control de enfermedades infecciosas.

“Lo que nosotros estamos haciendo es desarrollar un método de diagnóstico más eficiente basado en una tecnología que se denomina anticuerpos monoclonales – explicó el investigador – son anticuerpos específicos que se diseñan en ratones de laboratorio y es una técnica que permite obtener diferentes tipos de anticuerpos que van a ser específicos contra proteínas o antígenos de estos organismos que son patógenos para el ganado bovino”

Los científicos están estudiando in vitro  el parasito, que es Tritrichomonas foetus y por otro lado Campylobacter que es la bacteria. “Estamos caracterizando las proteínas que forman parte de estos microorganismos y los diferentes procesos biológicos  y las drogas que se usan para el tratamiento – resaltó Rivero – y de alguna manera queremos optimizar el tratamiento y el control de estas enfermedades”.

El objetivo a largo plazo es crear una vacuna contra estos patógenos. Con esto se eliminaría el problema y se hará desde la universidad una contribución relevante para la producción ganadera.

 

Material producido en la cátedra de Taller de Periodismo Científico. Docente a cargo: Nelva Coria